Fotógrafo de comuniones en Valencia
Es alucinante ver como cambian las niñas, una vez visten con su preciosos trajes de comunión, destacando con su saber estar, elegancia y su querer ser unas pequeñas mujercitas. Tan diferentes a esos niños inocentes y chuletas, aunque cada vez más exigentes con su imagen.
Es una campaña dura, por el corto espacio al que nos enfrentamos, pero no conformistas con lo sencillo, hacemos cada reportaje personalizado para cada niño, mimando cada detalle, para conseguir ese recuerdo que tan orgullosos quieren lucir y conservar para el recuerdo de sus vidas.
Nos ponemos al lado de los niños para sacar la mejor expresión de los niños, dándole esa confianza que necesitan para sentirse cómodos. Después de esas fotografías elegantes con sus trajes, les decimos que se traigan, otra prenda, más cómoda para ellos, como se ven todos los días, para romper con esa personalidad que crean con los trajes de comunión, y sacarles esa parte desigual que tanto estaban deseando sacar. Incluso en ese momento podemos salir del estudio y trasladarnos a un entorno natural, para pasar un rato divertido mientras inmortalizo toda esa alegría que tienen en los días previos de su comunión.